Cien Palabras ha cumplido 10 años. Gracias a todos.

Parece mentira. Hace diez años empece a escribir estos pequeños cuentos, y cree esta página para darlos a conocer. Al principio la intención era escribir uno cada día, pero al final la cosa se fue espaciando, lo que me remuerde la conciencia, pero que le vamos a hacer...

Os digo de verdad que intentaré ser más constante. Pero la voluntad es débil. Así que, como oí una vez: "No puedo aseguraros que lo intente, pero os aseguro que intentaré intentarlo."

Muchas, muchas gracias a todos. Gracias por leerme y, un poquito, por entenderme.


Jordi Cebrián



Éstos son mis cuentos de Cien Palabras.


Ocupan eso, 100 palabras exactas, sin contar el título.

Leed uno.
Despues otro.
Despacio, sin prisa.
Hay muchos, centenares de ellos.
Para sonreir, para reflexionar, para estremecerse...
Teneis tiempo, volved cuando querais.

22 diciembre, 2003

Problema postural

El doctor se le acercó de nuevo, con el instrumental. El dolor era intenso, lacerante. Es un problema postural, le aseguró el doctor sin dejar de manipularle la pierna, intensificándole el dolor. Tiene los músculos lesionados, una tendinitis grave, y riesgo de desgarros, insistió el doctor, mientras él chillaba. Un problema postural, si, podríamos llamarlo así. Debe tenerlo en cuenta, o la pierna le seguirá doliendo, aún más, y luego el dolor pasará a la otra pierna, podría llegar a perder las dos si usted no modifica su postura inflexible y acepta por fin contarnos todo lo que sabe.

19 diciembre, 2003

Cirugía

El cirujano acerca el bisturí a la médula. No es una operación complicada, pero hay que ir con cuidado, mantener la atención en cada instante. El cirujano separa los tejidos procurando no dañar los nervios, y recuerda entonces, como en un flash, que su mujer le ha pedido que cuando vuelva a casa no olvide de pasar por el supermercado y comprar papel de cocina y aceite, y piensa en ese momento que el coche aun está en el taller y deberá volver andando, maldito carburador, y entonces se da cuenta, pero ya es tarde, dios mío, qué he hecho.

17 diciembre, 2003

La mordedura del burro radioactivo

Ocurrió que mientras visitaba una feria de ganado, y por circunstancias que no vienen al caso, me mordió un burro radioactivo. Obviamente adquirí sus poderes, pero no creí conveniente darme a conocer haciéndome llamar el Hombre Burro, asi que decidí mantener el anonimato. Siempre intenté ocultar mis poderes, pero creo que en las reuniones de trabajo algunas de mis intervenciones hacían sospechar, en ocasiones, a alguno de los asistentes. Fue así como, poco a poco, supe aprovechar mis habilidades adquiridas para ir escalando posiciones. Hoy, que ya domino el mundo, podré desvelar por fin ante mis súbditos mi verdadera identidad.

16 diciembre, 2003

Apompaios

Ya le tenemos, y el pueblo corrió a ver como le paseaban, cautivo, en procesión, y los sacerdotes dijeron, he aquí la causa de nuestros males, ved aquí uno que odiaba a los hombres y ved que fuego y azufre serán su castigo. Y el pueblo vió que aquello era bueno, y cantaron y se regocijaron, y ovacionaron a sus reyes y buscaron leña para preparar la hoguera. Viendo arder la causa de sus males y sus cuitas, la multitud sintió que el fuego era bueno. Pero la maldad persistía, así que pronto buscaron más leña y alimentaron más llamas.

11 diciembre, 2003

Móviles

Yo era de los que no creía que las ondas de los móviles pudieran afectar a la salud. Pensaba, iluso de mí, que eran exageraciones, inventos de ecologistas tecnófobos. ¡Cuan equivocado estaba! Yo, que llevo siempre mi móvil en el bolsillo interior de la chaqueta, empiezo a percibir claramente pequeñas vibraciones contra mi pecho, emanaciones radioeléctricas que recorren mi sistema nervioso, alteran mis sinapsis, y me impiden sonreír a los niños o auxiliar a los pobres. Pulsos hertzianos que avanzan por mi médula espinal hasta mi cerebro, disolviendo las neuronas y forzándome a escribir en cien palabras majaderías como ésta.

04 diciembre, 2003

Protección (Homenaje a Frank Miller)

La pobre niña estaba indefensa ante los peligros y las maldades del mundo, así que sus protectores taparon sus oídos para evitar que oyera cosas terribles, que podían herirla y dañarla. Luego usaron el esparadrapo para cerrar sus ojos, y protegerla así de visiones que pudieran traumatizarla o influir negativamente en su maduración. Taparon su nariz con algodones, para que ningún olor la molestara o la incitara a pecar. Otro trozo de esparadrapo cubrió su boca, en diagonal, y una última tira formaría una cruz perfecta sobre sus labios cerrados. 'Estate tranquila, bonita. Uno más, y estarás totalmente a salvo'.

02 diciembre, 2003

Consultoría

En mi empresa encargaron una consultoría para realizar un estudio previo orientado a decidir la subcontratación del seguimiento de los proyectos que realizan empresas externas. Los consultores nos reunieron y repartieron hojas en blanco para que las llenáramos con nuestras ideas, y las fueron colgando por las paredes de la oficina. Por las tardes, según el plan, la señora de la limpieza subrayaba con rotuladores fosforescentes las frases más interesantes. Luego los consultores recogieron los papeles, y encargaron a un becario pasarlos a limpio. El informe gustó mucho a los jefes, pero a la señora de la limpieza la despidieron.

01 diciembre, 2003

Domingo

Será un domingo tranquilo, en casa, y observa aliviado desde el balcón el denso tráfico, y de pronto está allí, ante un volante en el calor del embotellamiento y, con el pie en el freno, mira pasar un tren allá a lo lejos, y de pronto está allí, sentado en el vagón junto a la ventana, viendo cómo la carretera va quedando atrás y el paisaje desfila ante sus ojos desconcertados, y ve pasar una granja, y un campo con vacas, y de pronto está allí, paciendo estupidamente mientras ve alejarse el tren, ese domingo que iba a ser tranquilo.