Cien Palabras ha cumplido 10 años. Gracias a todos.

Parece mentira. Hace diez años empece a escribir estos pequeños cuentos, y cree esta página para darlos a conocer. Al principio la intención era escribir uno cada día, pero al final la cosa se fue espaciando, lo que me remuerde la conciencia, pero que le vamos a hacer...

Os digo de verdad que intentaré ser más constante. Pero la voluntad es débil. Así que, como oí una vez: "No puedo aseguraros que lo intente, pero os aseguro que intentaré intentarlo."

Muchas, muchas gracias a todos. Gracias por leerme y, un poquito, por entenderme.


Jordi Cebrián



Éstos son mis cuentos de Cien Palabras.


Ocupan eso, 100 palabras exactas, sin contar el título.

Leed uno.
Despues otro.
Despacio, sin prisa.
Hay muchos, centenares de ellos.
Para sonreir, para reflexionar, para estremecerse...
Teneis tiempo, volved cuando querais.

02 mayo, 2008

La Muerte está triste

Encargaron una consultoría para mejorar el rendimiento de la Muerte, pues sus metodologías eran antiguas, y llevaban tiempo sin renovarse. Le pidieron que cambiara el vestuario y se encorbatara, que sustituyera la antigua guadaña por un maletín discreto repleto de armas, venenos e ideas dañinas. Instauraron protocolos y procedimientos burocráticos, y la Muerte se iba deprimiendo, sentada en un rincón sin poder matar a nadie porque faltaba un papel, o un permiso, o por no haberlo planificado con tiempo. Pero, no se sabe cómo, a los consultores que llevaban el tema les cayó encima un piano y nadie quiso sustituirles.


(Este relato está inspirado en la fotografía de Lapicero)

32 comentarios:

juanba dijo...

Creo que lo ocurrido fue el desencadenante de que, además de todo lo que le exigieron para llevar a cabo su trabajo de ahora en más, le pidieron también que tuviera una "actitud proactiva" en cuanto al mismo (?), y bueno, que ya sabemos como es esto, a todos los consultores y demás snobs del mercado de rrhh moderno les encantan estas dos palabritas actitud proactiva tan de moda por éstas épocas.

Salutes

Anónimo dijo...

La burocracia hay que arrancarla de raíz.

Vascø dijo...

XD
He sabido que le pidieron lo mismo al planeta Tierra, tambien desean mejorar su nivel de producción.
Ojala que no terminemos viviendo en jupiter.

saludos

PD: No sé como llegué a tu blog, pero valió la pena leerlo.

Indigo dijo...

genial la foto, y las cien palabras le hacen honor.
Abrazo

Queen of Leon!!! dijo...

Tu historia es parte de la inspiracion para un cuento q escribi, eso y unas cuantas experiencias propias.

Mucho talento, feliciades!!

Anónimo dijo...

jajaja...muy bueno. Esa manía por controlarlo todo, hasta a la muerte. Es algo tan ingenuo, tan artificial, tan fuera de lugar, tan infantil. Pero parece tan rebuscado, tan lógico, tan apropiado, tan adulto.

Al final, las cosas son como son Jordi: la muerte mata porque tiene que matar, es lo que se espera y sea como fuere así acaba siendo, eh?

Anónimo dijo...

Bueno el cuento,la construccion ,el remate. Malo esto de tecnificar todo,je,hasta la eterna muerte pobrecita ella. Bien che, dejemos a doña "la muerte"...y la vida en paz. Felicito al autor.

Relator Breve dijo...

Muy interesante

Relator Breve

Borja Echeverría Echeverría dijo...

Me acabo de enterar de la existencia de este blog y la verdad es que me han gustado mucho tus cuentos y tu humor negro, te añado a los enlaces de mi blog "trabateclas", te seguire leyendo.

Graciela L Arguello dijo...

Pobrecita Muerte, ella tan triste, me gustaría consolarla, pero tengo miedo de que se me caiga un piano en la cabeza a mí también.

Anónimo dijo...

De todos los relatos que he leído al azar en tu blog, éste me ha parecido el mejor. Muy redondo, muy perverso, muy divertido. Sigue por este camino y te compro el libro.

Anónimo dijo...

Bonito blog, me ha gustado

Gracias

-Sólo un surfer

Evinawer dijo...

Muy bueno, me gusta.

Si pudiera añadirlo a favoritos lo haría, mis felicitaciones

Mª Ángeles Cantalapiedra dijo...

Hola Jordi. He llegado hasta aquí casi como un juego de adivinanzas buscando dires de palabras mínimas (no sé, me enrollo más que una persiana).
Un adelicia tus minifcciones.

Camilo dijo...

Con esto, queda demostrado que a la muerte nadie la engaña.
Podremos demorarla, pero nunca detenerla.

Buen relato.

Anónimo dijo...

No se puede decir que la muerte no se toma en serio su trabajo. Suma un lector a tu blog

Anónimo dijo...

¿Y cuál sería el organismo que regularía éstas actividades?

Anónimo dijo...

Hola.

Me han impresionado y gustado los relatos del blog.
Me encantaría intercambiar un enlace a tu web. La mía es la siguiente: www.misrelatos.es

Un saludo.

Unknown dijo...

Encargaron una consultoría para mejorar el rendimiento de la Muerte, pues sus metodologías eran antiguas, y llevaban tiempo sin renovarse

Miriam Márquez dijo...

Muy ingenioso... Te invito a mi blog en el que hago trueque de historias... Por si te apetece participar..
Enhorabuena.

Manuel de Santiago dijo...

Quiero invitarte a que visites mi Blog. Ha nacido con gran ilusión y para contar muchas cosas. Sobre todo la fuerza que mueve este mundo. Al menos a mi me lo parece.
Un saludo.

Anónimo dijo...

Me ha gustado mucho el cuento. La version moderna de una muerte sin guadaña y mas eficiente y moderna la ofrecia tambien Saramago en sus Intermitencias de la Muerte.

Elektron_punk dijo...

He leido todos los cuentos y la verdad es que este me ha llamado la atención especialmente.

No hay forma de engañar a la muerte, creo que queda bastante claro...
Además renovar algo antiguo que sigue funcionando como la seda desde siempre, me parece una pérdida de tiempo, y creo que queda también bastante reflejado aquí también.


Saludos a todos

Heraldo de pies ligeros dijo...

excelente cuento, el tinte politico que lo cubre es sencillamente espectacular

Adrián dijo...

Caray, vaya facilidad que tienes.

Buen descubrimiento este blog. Felicidades.

Alejandro Ramírez Giraldo dijo...

Muy bueno, muy bueno, muy bueno. (Poco ortodoxo mi comentario, pero no tengo por qué hacer análisis académicos ni citas las autoridades en la materia).

Y lo mejor (de los pocos que he leído)es que no peca del síndrome del final sorpresa. Todo el que escribe un cuento corto cree que el final tiene que ser sospresivo (también soy pecador, lo reconozco).

Un saludo.

Anónimo dijo...

Pobre de la muerte, pero tuvo su venganza contra los consultores, además de que no sospecharon de ella.

Unknown dijo...

La muerte,aún siendo tan infalible,
no tiene total credibilidad;es
perseguida por el fantasma de la reencarnación quien la anula,así
como por la doctrina ancestral que determina que todo es imaginario,
quien la incluye.

Palillo dijo...

El día que descubrí este blog, este fue el último relato que leí, me encantó.
Luego quise seguirte pero veo que hiciste un parón y hoy (¿2 años después?) me he acordado del relato y he dicho: a buscar rápidamente ese blog.
Me alegro que estés de vuelta.

didimo dijo...

¡Me gustó! - En sí, deja entrever una dolorosa realidad. Unos pocos con poder a todo le andan metiendo cambio, para conseguir beneficio a toda costa de lo mismo y aumentar sus intereses económicos.

Lizzy dijo...

Simplemente genial. Todos tus relatos tienen algo mágico, algo que "engancha" y que te hace leer uno tras otro de forma imparable, pero éste en particular me ha parecido una genial metáfora de la adaptación que todos tenemos que sufrir (incluso la muerte) en esta vida. Perversamente estupendo.

Guido Tamer dijo...

Espectacular. Bravo.

Me gustaría que con esa capacidad, leas mis historias y comentes que te parecen. Aquí te dejo mi blog:
http://aquelloscuentosrebuscados.blogspot.com
Gracias.