Bombardeo en fin de semana
Empezaron a caer bombas la tarde del sábado… Es sabido que el país vecino tiene estas cosas, pero muchos llamaron al ministerio para quejarse. Como era sábado solo se podía hablar con un contestador, pero como el domingo no cesaba el bombardeo, los ciudadanos acudieron a la policía municipal. En las ordenanzas contra el civismo no se recogía explícitamente como una falta el arrojar bombas al suelo, aunque si papeles. Pero circular con vehículos no reglamentarios estaba sancionado, así que un par de agentes se pusieron a las puertas de la ciudad, a esperar a los tanques bloc en mano.
2 comentarios:
Jordi:
Recorro tu blog y no salgo de mi asombro. Sólo me queda felicitarte y desearte lo mejor.
Un abrazo.
Este cuento es muy bueno...
pro tdo esto q sale relacionado con el cuento son istorias reales y algunas personas q estan enfermas suelen y disfrutan haciendo daño a otras personas! xD
eso es muy malo!... buen cuento
saludos
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